Ciudad de México. El gobierno de México enfrentará “con sangre fría e inteligencia” los amagos del candidato ganador de la elección en Estados Unidos, Donald Trump, en cuanto a imponer aranceles en caso que la administración de Claudia Sheinbaum no colabore aún más para detener los flujos migratorios.

Así lo confirmó esta tarde el titular de la Secretaría de Economía, Marcelo Ebrard, al salir de una reunión con la mandataria federal en Palacio Nacional.

Luego de la conversación telefónica entre la Presidenta y el futuro mandatario estadunidense, Ebrard descartó que se pueda dar una confrontación con el gobierno de Trump y subrayó que desde hace meses el equipo de la presidenta mexicana estaba preparado para este escenario.

-¿Cómo enfrentar, de acuerdo con su experiencia, estas amenazas, estos amagos que ha hecho Donald Trump durante su campaña? -se le preguntó en una breve entrevista que dio al salir de Palacio Nacional.

-Con sangre fría e inteligencia —respondió.

-¿Se puede dar algún problema con la administración de Trump? —se le insistió.

-Yo no creo, no lo veo. Porque el tamaño del intercambio entre los dos países, comercial, hace que toda la lógica te lleva que lo fortalezcas. Entonces, pienso que la relación económica y comercial va a seguir hacia adelante, imagínate un crecimiento anual de 6.5 (por ciento),
tremendo, ¿no?, esto (según) las cifras de ellos.

El funcionario señaló que habrá reuniones con el equipo de Trump una vez que Sheinbaum así lo instruya.

“Pero pues está muy preparada (la mandataria) y todo el gobierno están muy preparados hace meses para ese escenario. Entonces aquí no hay sorpresas. Estamos listos”, enfatizó.

Ebrard destacó que la visita ayer a la presidenta de Larry Fink, presidente del fondo de inversión BlackRock, no fue coincidencia.

“Ayer Larry Fink. ¿Qué significó la visita de Larry Fink?, Larry Fink es probablemente uno de los… maneja uno de los fondos más grandes del mundo, estamos hablando de trillones de dólares, su fondo es más grande que toda la economía de Alemania y Japón, y más grande que todas las economías de América Latina. Vino a visitar la Presidenta Sheinbaum justo el día después, eso no es coincidencia, aquí no hay coincidencias.

“ ¿Porque vino? pues es un ‘endorsement’. Es un decir ‘tenemos confianza en lo que está México haciendo, y nos interesa lo que el gobierno está haciendo y queremos participar en lo que se está haciendo’. Entonces, yo veo que los mercados, en este caso con la presencia de uno de sus más claros representantes, pues están apostando a que México le vaya muy bien y nosotros también y nos va a ir muy bien”.