Desde las 11 de la mañana del martes 21 de enero, los manifestantes han esperado una reunión con las autoridades educativas para discutir la situación que afecta a más de 900 estudiantes de secundaria.

Por segundo día consecutivo, un grupo de padres de familia y maestros de la Escuela Técnica Industrial (ETI) de San Luis Potosí y de la Tipo 21 de Agosto, continúan con su protesta frente al plantel, justo en la calle Mariano Jiménez que mantienen bloqueada, la consigna es exigir respuestas claras del Secretario de Educación de Gobierno del Estado (SEGE) que quiere reubicar a los alumnos para instalar la Universidad Rosario Castellanos.

Desde las 11 de la mañana del martes 21 de enero, los manifestantes han esperado una reunión con las autoridades educativas para discutir la situación que afecta a más de 900 estudiantes de secundaria. Sin embargo, hasta el momento, no han recibido respuesta concreta y aseguran estar siendo ignorados por el gobierno estatal.

Martha, madre de familia y una de las principales voces en la protesta, expresó su frustración por la falta de soluciones claras ante lo que consideran una violación directa al artículo tercero de la Constitución, que garantiza el derecho a la educación.

“No nos han dado ninguna respuesta clara sobre un plan de reubicación. Es mentira que haya un plan, lo que nos están diciendo no tiene fundamento y es completamente absurdo”.

El argumento del gobierno para justificar la crisis de la ETI y a la Tipo 21 de Agosto es una supuesta falla geológica en el terreno donde se encuentra el edificio escolar. Sin embargo, los manifestantes consideran que esta justificación es solo una excusa para desviar recursos públicos.

“Nos dicen que hay una falla geológica, pero si esa fuera la razón, cómo van a poner la universidad en el mismo lugar, van a afectar también a los estudiantes de la universidad. Esto no tiene sentido”.

Lo que más les preocupa es que no existe un plan oficial de reubicación para los estudiantes de la ETI. Fue recientemente, los representantes de los salones de clases les pidieron información personal, como los nombres de los estudiantes y las direcciones de los hogares, lo que fue interpretado por los padres como una estrategia sin fundamento y sin autoridad para garantizar una reubicación efectiva.

“No nos dan ninguna solución, solo nos piden datos personales, pero no hay ninguna garantía de que se vaya a cumplir con lo prometido, pero no nos creemos nada, porque no nos han presentado un plan concreto”.

Se quejan de que la opción de trasladar a los alumnos a estas escuelas porque es completamente inadecuada, ya que no cuentan con la infraestructura necesaria para recibir a los estudiantes de secundaria.

“A las primarias que nos están sugiriendo no se les dan clases constantemente, y ahora van a meter a los niños ahí. Eso es imposible. Lo que estamos exigiendo es una solución real, no excusas”.

Los manifestantes también han señalado que la falta de comunicación con las autoridades estatales ha sido un factor clave en la creciente desconfianza hacia el gobierno. El secretario de Educación, quien debía reunirse con los padres y maestros a las 10 de la mañana, no ha dado la cara, enviando en su lugar a funcionarios de menor rango que no han podido ofrecer respuestas claras.

Fuente: Sol